¿Coaching es una especie de terapia?

«Solo la verdad os hará libres»

Juan el Bautista (Predicador judío, 5 AC – 28 DC)


La respuesta es, absolutamente NO.

Es frecuente confundir al Coaching con otras disciplinas de apoyo y desarrollo personal como Terapia Psicológica, Mentoring, Consulting o Training.

A diferencia de estas otras disciplinas en que un experto aconseja o brinda asesoramiento al Cliente con relación a su tema, los Coaches somos expertos en la profesión del Coaching, NO en la vida de nuestros Clientes. Este es el principal motivo por el cual en las sesiones de Coaching no damos consejos, no asesoramos, no enseñamos ni entrenamos al Cliente de modo alguno.

No obstante ello, los Coaches podemos tener certificaciones adicionales que nos habilitan a asumir el rol de Capacitadores o Entrenadores, brindando formaciones en ciertas habilidades generativas indispensables para el desempeño profesional en organizaciones y en la vida. Tal vez esta sea una de las tantas fuentes de confusión.

Los Coaches certificados de formaciones acreditadas, conocemos perfectamente los límites del alcance de nuestra profesión y estamos éticamente obligados a informarlo a nuestros Clientes. De ese modo, cuando notamos que el mismo puede beneficiarse de otro abordaje, lo promovemos para su bien mayor.

La International Coaching Federation (ICF) considerando la Ética (1) de nuestra profesión, comparte una guía práctica de apoyo a nuestro ejercicio profesional, para casos específicos de derivación al soporte de Terapia Psicológica o que directamente escapen en su totalidad a nuestro marco de desempeño profesional (2).

Según esta guía, las diferencias entre Coaching y Terapia Psicológica refieren al:

  • Foco
  • Propósito
  • Encare con su público objetivo

El foco del Coaching es pro-resultado. Un Coach escucha cómo el Cliente se percibe a sí mismo y al mundo que lo rodea y lo acompaña a enriquecer su marco de referencia ganando nuevas perspectivas, de modo que pueda a ir hacia su futuro con un nuevo equipaje de recursos y con un plan de acción a medida, concreto, medible y expansivo.

El propósito del Coaching es acompañar a que el Cliente se inspire en su propio potencial, se empodere y mejore los resultados que conseguía hasta ahora, tanto en su vida personal como profesional.

Las disposiciones anímicas juegan un rol preponderante en la vida de los seres humanos y junto con el propósito, son el motor que los acerca o aleja de los resultados deseados. Tanto en Terapia Psicológica como en Coaching, se trabaja con las emociones que emergen, sin embargo el encare del Coaching en este tema, refiere a identificación y expansión de aquellas conducentes y a la gestión ecológica de las no conducentes, para que los Clientes tengan los resultados que desean.

Coaching TAMPOCO ES:

  • Consejería (Counselling)

Coaching no aconseja ni brinda opinión acerca de la situación que el Cliente trae a la sesión. El Coach trabaja con el Cliente en una relación de simetría.

  • Mentoría (Mentoring)

Salvo excepciones, los Coaches no somos expertos en la misma materia o profesión que el Cliente.

De cualquier modo, Coaching no brinda asesoramiento, consejo, ni guía de ninguna clase, relativa al área de expertise del Cliente.

  • Training (Entrenamiento ni Capacitación de tipo alguno)

Deportivo, oratoria, negocios, etc.

En cualquier caso, el Coaching puede acompañar a que el Cliente que recibe el asesoramiento de un especialista exprese su máximo potencial  en el  aprovechamiento del mismo.

(1) Código de Ética de la ICF

(2) Referring a Client to Therapy – A set of Guidelines, 2018

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